Cubrirse la boca, nariz, ojos,
cabello y piel. Esta medida de protección si es adoptada por adultos y
autoridades es doblemente importante porque transmite un mensaje a niños y
jóvenes que necesitan ejemplos para emular.
Asegurar cuando salgan a la calle
usar gorro, anteojos y máscaras para polvodescartables o barbijos dobles o
pañuelo humedecido, para cubrir la nariz y la boca, especialmente si está por
hacer trabajos en el exterior de la casa. Se puede también usar bufandas o
cuellos de tela polar, con tramas apretadas si la exposición es temporal.
Debe asegurarse que el ambiente
donde se refugia la familia sea cuidadosamente protegido, cubriendo las
rendijas de puertas y ventanas con trapos humedecidos.
Impedir que los niños jueguen al
aire libre.
Asegurar que cuando los niños
salgan a la calle tengan gorro, anteojos y, lo más importante, máscaras
descartables o barbijos dobles o pañuelo humedecido. Para cubrir la nariz y la
boca se puede también usar bufandas o cuellos de tela polar, con tramas
apretadas.
Usar indumentaria de manga larga
para mantener la piel mayormente cubierta.
Al regresar a la casa lavarse las
manos y hacer lo mismo con las de los niños (evitando que ingieran ceniza). En
general se recomienda un baño con jabón neutro o de glicerina y luego aplicarse
crema humectante.
Es importante la hidratación por
lo que se recomienda tomar abundante agua.
No refregarse los ojos; lavarlos
suavemente con agua y si arden consultar al médico.
Estas medidas deben ser aplicadas
siempre, aunque la caída directa de cenizas ya hubiera finalizado. Esto se debe
a que el viento o vehículos remueven las partículas más finas ya caídas,
generando los mismos daños que en el momento de la lluvia de cenizas.
Durante un fenómeno adverso los
adultos deben ser cariñosos y mostrar su fortaleza; apoyando con palabras,
gestos y actitudes a los menos fuertes, sin olvidar que el afecto es la
herramienta que permite transformar un período difícil en una experiencia
constructiva.
Los niños padecen angustia: hay
que mostrarles cariño, dialogar con ellos, averiguar cómo sigue su
desenvolvimiento en la escuela y ayudarlas en las tareas.
Motivarlos puede ser de gran
ayuda en los momentos difíciles.
Alabar las actitudes acertadas de
los hijos y reflexionar con ellos abiertamente sobre hechos o situaciones.
Prestar atención a los enfermos y
discapacitados: hay que hacerles entender que pueden contar con Usted.
DEMANDA DE AGUA
Puede que sea necesario controlar
la demanda de agua para evitar la escasez de la misma en usos críticos
(especialmente para la extinción de incendios, agua potable y saneamiento). Una
discrepancia entre la demanda y el suministro de agua puede ser creada por la
presión del agua y problemas de abastecimiento, así como un aumento de la
demanda para la limpieza de cenizas.
Puede ser necesario recurrir a
las restricciones de uso del agua o racionamiento después de la caída de
ceniza.
La ceniza volcánica en suspensión
en el agua pueden obstruir filtros y aumentar el desgaste de las bombas y otros
equipos utilizados en los sistemas de suministro de agua. Para reducir el daño
físico a los sistemas de abastecimiento de agua, equipo y las bombas deben
estar cubiertos cuando hay una lluvia de cenizas inminente, y la ceniza debe
ser removida antes de reanudar las operaciones normales.
TANQUE DE AGUA Y BEBEDEROS DE
CHACRAS
Además de turbidez potencial y
problemas de acidez, los cuerpos de agua al aire libre (ríos, lagunas, etc.)
cerca de un volcán en erupción con una baja relación volumen-zona de captación,
pueden estar sujetos a la contaminación química de los lixiviados, en
particular, de flúor. Cuando se produce la caída de ceniza, los hogares con
toma de agua del techo (agua de lluvia) de inmediato deben desconectar las
tuberías que van al tanque de abastecimiento de agua. Si la ceniza que se
acumulan en el tejado y las cañerías no se desconectaron, se recomienda testear
el agua del tanque antes de su uso como agua potable. Si el test no es posible,
se recomienda que se drene y enjuague el tanque y vuelva a llenar con agua no
contaminada.
Los bebederos son muy vulnerables
a la contaminación y lo más probable es que tenga que vaciar y volver a llenar
después de una lluvia de ceniza. Un tanque de agua tapado estará a salvo de la
contaminación directa la caída de ceniza, y se puede dar el suministro de agua
durante los períodos de caída de ceniza, si se conserva con cuidado el uso del
mismo.
Se recomienda que los depósitos
de agua y los alimentos que se elaboran y consuman al aire libre deban ser
cubiertos.
La contaminación de las fuentes
de agua subterránea es relativamente improbable, a menos que la ceniza sea tan
abundante que entra por la boca de los pozos (si están sin tapas de protección)
y ensucie el agua captada.
VEHÍCULOS
Debido a que la ceniza volcánica
se compone de pequeños fragmentos de roca y vidrio volcánico, éstas pueden
infiltrarse en las de apertura y lijar o rayar la mayoría de las superficies,
en especial entre las partes móviles del equipo. Partículas de cenizas pueden
fácilmente obstruir los sistemas de filtración de aire, lo que puede producir
un sobrecalentamiento y avería de motores. Los daños a las tuberías de abastecimiento
de agua han sido en general leves.
Si fuera posible, evite conducir,
ya que las cenizas son dañinas para los vehículos, los caminos pueden estar
resbaladizos y el paso de los vehículos levanta las cenizas al aire, lo cual
causa mala visibilidad y puede ser dañino o irritante para los demás.
Si es imprescindible conducir,
hágalo a baja velocidad, encienda las luces de su vehículo. No use los
limpiaparabrisas si hay cenizas secas sobre el, pues puede rayar el vidrio. Si
la lluvia de cenizas fue espesa, sólo debe usarse el vehículo para una
emergencia.
Use agua embotellada y un trapo
para limpiar los parabrisas tantas veces como se requiera, esto puede ser cada
escasa decena de metros.
Cambiar el aceite y los filtros
de aceite frecuentemente (cada 80-160 km. en caída de ceniza intensa; cada
800-1600 km. en caída poco intensa).
No conduzca sin filtro de aire.
Si no lo puede cambiar, límpielo soplándole aire de adentro hacia fuera. Como
el daño a los filtros del motor son muy importantes, algunas recomendaciones
caseras para atenuar sus efectos, son la colocación de medias de nylon en la
entrada de aire para proteger lo mejor posible del ingreso de cenizas finas.
Algunas personas han usado los trapos amarillos que se utilizan en cocinas o
telas de polar.
Limpieza de su auto: limpie la
ceniza del interior del motor, baúl, lo mismo que el área de asientos. Cepillar
o pasarle un trapo a la carrocería para retirar las cenizas del auto puede
rayarlo.
Lleve a un servicio de limpieza
el sistema de frenos cada 80-160 km. para condiciones del camino muy severas, o
cada 320-800 km. para condiciones intensas. Los frenos deben ser limpiados con
aire comprimido.
Haga limpiar el alternador con
aire comprimido si hubo alta acumulación de polvo, cada 800-1600 km o después
de una alta exposición a cenizas.
Limpie su vehículo, incluyendo el
motor, radiador y otras partes esenciales diariamente, si es necesario usando
agua para enjuagar la ceniza.
Es posible que tenga problemas
con las cerraduras. Suelen arruinarse al ingresarle ceniza.
Es posible que comience a ver
óxido en las zonas que la carrocería perdió la pintura. Eso no solo ocurrirá en
los vehículos, sino en todo lo metálico.
EQUIPOS ELECTRÓNICOS
Limpie su computadora, televisor
o radio usando la aspiradora. Desconecte el control principal de la fuente de
energía de la máquina antes de llevar a cabo esta operación.
Durante varios meses después de
la lluvia de cenizas, los filtros deben reemplazarse a menudo. Los filtros del
aire acondicionado y del calefactor de ambientes necesitan atención cuidadosa.
Limpie los huecos de ventilación de la heladera. Limpie cualquier superficie
que pueda arrojar aire y recircular cenizas. Los ventiladores de hornos y
estufas deben limpiarse minuciosamente.
No use escobas con pelos laterales
para limpiar pasillos y pisos porque las partículas de polvo se regresan al
aire.
No limpie soplando con aire
comprimido o barrido en seco ya que las cenizas se transportan en el aire.
No use ventiladores o secadores
eléctricos de ropa que puedan levantar cenizas al aire