CHIMPAY.-El obispo de la Diócesis de Viedma Esteban Maria Laxague que, finalizada la celebración anual ceferiniana, lo mayormente escuchado de parte de los peregrinos fue la sensación de “ser esperados por los chimpayenses”.
Destacó que muchas de las obras efectuadas en el parque Ceferino y sus inmediaciones le otorgaron a la fiesta un marco distinto a ocasiones anteriores siendo gratamente recibido por los ocasionales visitantes.
Sobre la reunión evaluativa de la fiesta expresó que “hemos tomado nota de todos las aciertos y falencias para corregirlas en la próxima peregrinación 2013. Es muy positivo que nos encuentre trabajando juntos para comenzar a pensar caminos nuevos que andar, siempre escuchando al peregrino”.
Durante la peregrinación, por primera vez, estuvo de visita el Padre Inspector de los Salesianos Angel Artime Fernández quien se llevó una grata impresión del santuario y la fuerte devoción al Beato Ceferino Namuncurá. “Su presencia promueve que nuestra fiesta tome aún mayor trascendencia en la decisiones pastorales respecto de esta parroquia que es el motor de la celebración”, concluyó Laxague.
Por otra parte señaló que, atentos del camino a la canonización y tomando en cuenta la devoción que, año tras año se multiplica y se percibe en cada celebración, podrían descubrirse aquellos milagros que propicien este paso final para que Ceferino sea proclamado como Santo en el mundo entero.
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